Prometí amarte toda la vida y era cierto, no tenia dudas que lo haría, pero tuviste planes muy diferente y me heriste, dices tu por accidente, si me desligue de ti si no tengo ganas de defenderte es porque creo que mi corazón estaba ciego te confundió con un hombre realmente valiente, aquellos que no se dejan intervenir la mente con cosas banales, tan valientes que entregan su corazón antes de romper alguno.
Que estupidez fue que me perdieras y siento estar para verlo, siento tener que mirar y observar como perdido buscas evadir la verdad excusándote en poca memoria. Maldigo el episodio era tan fácil decirlo todo en la primera conversación y terminar con error. solucionarlo o ponerle fin, pero, decides alargarlo y terminas por decolorar mi corazón.
Ojalá no esperes en este momento mas de mi, ya tengo bastante remediando mi dolor y no te atrevas a llorar si soy yo quien debe sacar fortaleza para que mis ojos no sean una cascada frente al mundo, por haber sido mas de lo que merecías, por haberte dado la libertad que no ameritabas, por creer que había un ser humano en el mundo distinto a los demás de su especie.
Seguramente ahora llena de demonios que me alejan del olvido, que juegan contigo seguiré perdiendo días de un amor que parecía ser de aquellos cuentos de hadas, esos modernos que solo mi lengua declamaba cada vez que contaba desde el principio, hasta ese día nuestra historia de amor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario